Melody vuelve a casa por (Tu) cara: diva eurovisiva e imitadora se cruzan en una final con sabor a revancha
Dicen que no hay segundas partes buenas… salvo que seas Melody, que vuelve por la puerta grande a Tu cara me suena justo cuando una de las finalistas, Ana Guerra, decide ponerse en su piel. O en su vestido de lentejuelas, que para el caso es lo mismo. Doce años después de quedar a las puertas de la gloria en la tercera edición del formato, la artista sevillana regresa al plató de Antena 3 para ejercer de musa viva en una gala final que promete más piruetas que una final olímpica de gimnasia rítmica.
La propia Melody lo ha anunciado con elegancia en sus redes: “El Apagón está iluminando cada momento”. Por si a alguien se le había olvidado, es el título de su último single. Pero no es lo único que vuelve a iluminar: Melody recupera presencia estelar en el prime time de Atresmedia, tras su comentada (y no precisamente por la música) aparición en la rueda de prensa de RTVE posterior a su paso por Eurovisión 2025.
Ana Guerra, de OT a TCMS (pasando por Basilea)
La que fue alumna aplicada de la Academia de Operación Triunfo se enfrenta ahora al mayor reto de su carrera: hacer de Melody sin morir en el intento. La canaria no se lo toma a broma y hasta ha compartido vídeos de ensayos donde intenta, con más voluntad que equilibrio, imitar la mítica pirueta eurovisiva de la andaluza. “Gracias por prestarme a tu bailarín, pero necesito ayuda”, confiesa entre risas. Melody, generosa, le responde con un “Tú puedes”. Espíritu eurovisivo no le falta, desde luego.
¿Final o redención?
Con una final que reúne a Melani, Mikel Herzog, Gisela, Esperansa Grasia y la propia Ana Guerra (tras la retirada sorpresa de Bertín), la gala promete ser una montaña rusa de imitaciones, nostalgia y algún que otro número que dará que hablar. Pero todos los focos apuntan a un momento muy concreto: el reencuentro entre la Melody original y su doble de plató, interpretando Esa diva, la canción con la que España intentó conquistar Europa y acabó… en Basilea.
Una historia de segundas (y terceras) vueltas
La última vez que Melody pisó este plató fue para rozar la victoria, en una final apretadísima con Edurne, que acabó llevándose el trofeo. Curiosamente, Edurne también reapareció hace poco por el programa. ¿Casualidad? ¿Destino? ¿O simplemente la capacidad infinita de Tu cara me suena para reciclar talento con sentido del espectáculo?
Sea como sea, la sevillana no solo vuelve, sino que lo hace por todo lo alto, con cariño hacia el formato y una pizca de ese fuego competitivo que nunca se le apaga. Porque si algo ha quedado claro tras su paso por Eurovisión es que Melody no se rinde jamás… ni siquiera cuando la imitan.
Fuente: Antena 3
