Eurovisión 2026: la EBU abre la puerta a revisar la participación de Israel y deja la incertidumbre en el aire

El debate que no cesa
Apenas unos días después de confirmarse que Viena será la sede de Eurovisión 2026, el festival ya está en medio de su primera gran polémica. Martin Green, el responsable ejecutivo del certamen, ha dejado entrever que la participación de Israel sigue siendo un tema “abierto” y que la decisión final podría cambiar en los próximos meses.
En una entrevista concedida a ORF, Green se pronunció con cautela, pero sus palabras dejaron más preguntas que respuestas:
“En este momento, cualquier miembro de la EBU que presente su candidatura tiene derecho a participar. Pero será un tema que seguirá debatiéndose durante todo el año”, afirmó.
Aunque evitó mencionar directamente a Israel, el mensaje estaba claro: el apoyo automático que durante años ha tenido su participación ya no está tan garantizado.
Islandia, Irlanda, Eslovenia… y España piden revisar el caso
El ambiente se complica aún más porque en diciembre el asunto volverá a la mesa de debate de la EBU, tras una solicitud formal presentada por Islandia, Irlanda, Eslovenia y España. Estos cuatro países han pedido revisar el estatus de Israel en Eurovisión 2026, alegando que la situación en la región y la reacción pública en Europa requieren un nuevo examen.
El simple hecho de que la discusión se repita ya supone un cambio de rumbo. Aunque finalmente no se tomen medidas que excluyan a Israel, el hecho de que el tema esté en la agenda oficial rompe la sensación de consenso automático que hasta ahora acompañaba a la delegación israelí.
Patrocinios, presión política y un festival en tensión
Mientras tanto, la EBU acaba de renovar su contrato con Moroccanoil, empresa israelí que patrocina Eurovisión desde 2019. A pesar de las presiones para cortar vínculos, la decisión confirma que, al menos en el plano comercial, no hay intención de romper lazos.
Por otro lado, varias delegaciones europeas siguen presionando para que la organización revise su posición. Lo que antes era un “festival sin política” empieza a parecer un tablero diplomático.
Lo que viene
A día de hoy, la Corporación Pública de Radiodifusión de Israel no contempla renunciar a su plaza en Eurovisión 2026 y continúa preparando su candidatura como si nada hubiera pasado. Sin embargo, la declaración de Martin Greenmarca un antes y un después: es la primera vez que un alto cargo de la EBU deja caer, aunque sea de forma indirecta, que la presencia de Israel podría estar en riesgo.
Con el festival previsto en Viena para mayo de 2026, queda claro que la música no será la única protagonista: la política internacional también pide su turno en la escaleta.
Fuente: Israel Hayom