El club más selecto de Eurovisión suma dos fichajes conocidos… y sigue esperando a ORF
La máquina eurovisiva nunca se detiene. Mientras medio continente canta “Deslocado» bajo la ducha, en las oficinas de la Unión Europea de Radiodifusión (UER) se siguen moviendo fichas. Y esta vez, lo han hecho en el santuario más secreto del festival: el Grupo de Referencia. ¿La novedad? Se suman dos nombres ya conocidos, como quien vuelve al trabajo después de unas largas vacaciones.
Tomislav Štengl (HRT, Croacia) y David Tserunyan (AMPTV, Armenia), jefes de delegación de sus respectivos países, se incorporan como miembros invitados al órgano que decide qué se cambia, qué se mantiene y qué se cancela en el universo eurovisivo. Ambos ya habían formado parte del grupo en el pasado y ahora regresan con un mandato de dos años. Un comeback digno de una semifinal.
¿Y quién falta en esta fiesta tan exclusiva?
Actualmente, el Grupo de Referencia está formado por ocho miembros, incluyendo a pesos pesados como Ana María Bordas (RTVE), que ejerce de presidenta, o figuras clave como Ebba Adielsson (SVT), que organizó la edición de 2024 en Suecia.
Sin embargo, falta una pieza clave en el puzle: el representante de la ORF, la televisión pública austriaca que organizará Eurovisión 2026. Y ya que estamos, también el nuevo Supervisor Ejecutivo del festival, que se hace de rogar más que un televoto italiano.
Un club de élite que se reúne más que un grupo de WhatsApp
El Grupo de Referencia, creado en 1998, se reúne entre cinco y seis veces al año (más que algunos consejos de ministros) para tomar decisiones vitales: revisar el formato, modernizar la marca, asegurar el presupuesto y, de paso, evitar que alguien quiera votar a su propio país.
Está compuesto por una presidenta, tres miembros elegidos por los jefes de delegación, dos productores ejecutivos de ediciones recientes, el productor de la edición en curso, el Supervisor Ejecutivo y, como en este caso, hasta dos miembros adicionales por invitación.
Con los fichajes de Stengl y Tserunyan, el grupo ya calienta motores para lo que vendrá en 2026. Pero sin representación oficial de ORF ni un nuevo supervisor, hay quien se pregunta si no estamos en un ensayo general sin protagonista. Aunque bueno, en Eurovisión, siempre hay tiempo para una gran entrada en el último minuto.
Fuente: EscToday
