Eesti Laul 2025: Tommy Cash y su ‘Espresso Macchiato’ llevan el caos estonio a Eurovisión»

Tallin vibró anoche con una de las finales más surrealistas y electrizantes de su historia. El Eesti Laul 2025, presentado por Eda-Ines Etti (icono eurovisivo del 2000) y Korea (representante estonio en 2024), coronó a Tommy Cash como ganador tras una noche donde el rock gótico, el swing italo-estonio y la disco-music retro compitieron por un billete a Basilea.
Crónica de una noche que desafió la gravedad (y el buen gusto)
Los tres finalistas que lo dieron todo
Tommy Cash – Espresso Macchiato
El artista, vestido como un mafioso de cómic, fusionó italiano y estonio en un swing caótico. Entre acordeones distorsionados, coristas con máscaras de café y una coreografía que parecía sacada de un sueño febril, Tommy convirtió el escenario en un espresso doble de locura.
Andrei Zevakin & Karita – Ma ei tea sind
Dueto gótico con guitarras distorsionadas, luces rojas y una estética que habría enamorado a Tim Burton. Su Goth-rock en estonio fue un punch al hígado, pero el público lo premió con el pase a la Superfinal.
An-Marlen – Külm
La sorpresa de la noche. Su tema dance en estonio, con beats adictivos y una puesta en escena glacial, hizo bailar hasta a los jueces más serios.
El resto de actuaciones: De cisnes a discotecas
- Ant – Tomorrow Never Comes: Una balada con una bailarina Cisne Negro y una escalera al cielo. Elegante, pero previsible.
- Stereo Terror – Party Till the End of the World: Kiss versión báltica. Lluvia de fuego, humo y adolescentes gritando.
- Janek – Frozen: Atrapado en un cubo de plexiglás, su pop pegadizo sonó a Frozen sin Elsa.
- Räpina Jack & Kaisa Ling – Tule: Country folclórico con hoguera
- Marta Lotta – Tantsin veel: Cerró la noche con una bola de discoteca gigante, frases en francés sin sentido y spandex brillante.
¿Qué significa esto para Estonia en Eurovisión?
Con Espresso Macchiato, Estonia no busca ganar. Busca ser recordada. La mezcla de idiomas, coreografía absurda y energía camp podría convertir a Tommy Cash en el rey del meme en Basilea… o en el dark horse que nadie vio venir.